11 de julio de 2005

Ouch

Un fin de semana bastante ajetreado acabo de concluir. De hecho hace mucho que no tenía uno así. Va un breve realto.

Viernes, noche de perredistas. Los presentes, cierto precandidato a la jefatura de gobierno del DF, un dipultado local y el anfitrión, periodista de renombre que actualmente escribe para un diario de izquierda en la ciudad de México.

El tema de la plática fue la precandidatura del primero a la jefatura de gobierno, cuál será su estrategia, que alianzas tiene y sus oportunidades reales. El consenso, aunque nadie se lo dijo muy claramente, es que no tiene la menor oportunidad, hay otros candidatos mucho más fuertes y con mejores oportunidades. A pesar de ello aparentemente va a continuar hasta el final, no quiere aliarse con nadie. En fin, veo un negro futuro para él.

Después de que el precandidato y el diputado se fueron, el anfitrión, su mujer, mi acompañante y yo decidimos que era un buen momento para tomar camino hacia Cuernavaca y continuar la reunión en cualquier antro de esa ciudad. Dicho y hecho, amanecimos en la vecina ciudad (hace tanto que no hacía algo tan claramente inmaduro, pero sí que me divertí).

El sábado, ya desayunados y repuestos regresamos al DF y cada quien a sus asuntos... hasta en la noche que se festejaba el cumpleaños de una amiga, en un bar de Polanco del cual no recuerdo ni siquiera el nombre (tengo aversión a Polanco, de modo que fue un verdadero esfuerzo ir, así que no es extraño que el nombre del lugar se haya ido a la papelera de reciclaje). La cita a las diez de la noche, el lugar muy caro aunque no tan malo como esperaba.

El domingo temprano a trabajar, a la función de circo Atayde, que trae nuevos actos. De ahí a desayunar algo por favor y regresar a casa a para mantenerse en estado vegetativo hasta que llegara la noche.

En resumen, en todo el fin de semana dormí menos de siete horas. Hoy... bueno para que les digo como estoy hoy. Pero sí que me divertí; por lo menos no me aburrí.

(Nota: cuando entren no hagan mucho ruído, gracias)

Adiós

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