Cuauhtémoc Cárdenas

El día de ayer, casi todos los periódicos "nacionales (nacional significa que se editan en Ciudad de México)" encabezaron con la noticia de que Cuauhtémoc Cárdenas desiste de contender a la presidencia de la República por su partido, el PRD. Da también un ambiguo mensaje que puede interpretarse como que contenderá por otro partido, sin embargo no lo deja claro.

Cárdenas por supuesto es uno de los artífices de la transición democrática que ahora vive México; la lucha constante que él encabezó desde 1987 y hasta hoy han cuajado en lo que hoy es este país. Pero para la izquierda (lo que sea que eso signifiqué) cada vez es más un lastre. Es el eterno candidato perdedor (aunque en realidad ganó en 1988 pero no se le reconoció su triunfo, y ganó también en 1997 la gubernatura del Distrito Federal, lo que le resultó más contraproducente que benéfico) pero con un liderazgo moral incuestionable, de modo que es el candidato obligado... Hasta que apareció López Obrador y de pronto todo el PRD y los sectores "progresistas" de la sociedad mexicana olvidaron por completo al ingeniero y voltearon al tabasqueño.

Por supuesto que esta situación era demasiado para la imagen que de sí mismo tenía Cárdenas (máxime que vio ganar a Lula en su cuarto intento), de modo que ha hecho lo posible por boicotear la candidatura de López Obrador. Pero la peor parte acabó llevándola él por dos cosas. Primero, toda la estructura del PRD está ya dominada por Andrés Manuel y luego los verdaderos damnificados al interior de ese partido por los escándalos de Ahumada son los cárdenistas (recuerden que Rosario Robles era la más fiel de sus hijas).

Ahora el ingeniero ha declarado que no contenderá (sabia decisión por cierto, las encuestas le daban menos del diez por ciento frente al casi noventa de su contendiente para obtener la candidatura del PRD). Pero ha lanzado un buscapies para inquietar al partido. Deja entrever que se va, y que buscará la candidatura en otro partido (¿el Verde, Convergencia, el de Patricia Mercado?). Ya hoy la izquierda mexicana está en crisis por la declaración, unos ya dijeron que se van con Cuauhtémoc, otros lo han condenado, otros aseguran que en ningún lado se lee que se va, en fin la confusión es espantosa.

Cárdenas no tiene la menor oportunidad de ganar en el 2006, mucho menos fuera del PRD, pero lo que sí puede hacer es terminar de reventar este partido y de esa manera boicotear la posibilidad de triunfo que hoy tan claramente tiene Andrés Manuel López Obrador. La izquierda de nuevo volviéndose sobre si misma, enredada en intereses nada claros. Como siempre el peor enemigo del PRD es el PRD.

Adiós