Algo que ya perdimos en este escenario de crisis es la tolerancia. Den una vuelta por algunas bitácoras y verán descalificaciones, ofensas, insultos y sobre todo prácticamente ninguna argumentación. Por supuesto hay honrosas excepciones, pero la norma es esa. De un día para otro perdimos toda capacidad de escuchar el punto de vista del otro y dejamos que nuestras visceras opinen por nosotros.
También hemos visto ya la polarización de los actores, por ejemplo los medios. Ayer la nota de Adela Micha sobre la golpiza de afuera de San Lázaro fue ilustrada con imágenes de perredistas lanzando una valla en contra de los granaderos. Lo que no dijo es que ellos trataban de superar la línea exterior (formada precisamente por granaderos), mientras la PFP se sonaba a sus compañeros más allá de esa valla. Y en verdad que sí los golpearon. pero el punto es que de esa manera se manipula la información de acuerdo al interés de la televisora. Ese es sólo un ejemplo, es ocioso que hable de La Jornada o del Reforma, aunque la postura de estos dos es más genuina y honesta que la de Televisa por ejemplo (porque estos medios se asumen como parte, lo cual es legítimo).
En fin, siguen dos cosas, la decisión del Tribunal y lo que suceda el 15 y 16 de septiembre; parece que el 16 ya está planchado, lo que aún no se negocia es el 15. Veremos quien da el grito.
Adiós
15 de agosto de 2006
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